Ante las próximas vacaciones de verano me permito sugerir algunas orientaciones para que, además de disfrutar del tiempo libre, sus hijos e hijas realicen actividades que les permitan no olvidar los conceptos estudiados y mantener los hábitos de trabajo desarrollados a lo largo del curso.
Durante el verano hay tiempo para muchas cosas: tiempo para divertirse y disfrutar de unas . . necesarias vacaciones que les permitan recuperarse del esfuerzo realizado durante el curso e iniciar así el próximo descansados y con ánimos; tiempo para disfrutar de la familia, para acudir a un campamento de verano, para desarrollar sus actividades de ocio preferidas como pintar, jugar, escuchar música o realizar algún deporte. Pero también es posible dedicar parte de este tiempo a conservar e intensificar el hábito lector: un tiempo diario para disfrutar de un ratito de lectura tranquila leyendo aquellos libros que más les gusten.
Si os parece oportuno, siempre viene bien dedicar un periodo de tiempo, para el que podéis preparar un horario, con preferencia por la mañana, antes de salir, o después de comer, para escribir de forma creativa; un diario, cuentos, historias o pequeños relatos. Y pueden también repasar los contenidos trabajados con cualquier libro de vacaciones existente en el mercado para el nivel o realizando los ejercicios que encontrarán en el propio libro de este año en sus últimas páginas que están dedicadas precisamente al repaso de lo aprendido. También podéis comprar algunos de los cuadernos de refuerzo para lenguaje y matemáticas que hay en el mercado, en los que repasarán operaciones básicas, realizarán problemas de cálculo o mejorarán su expresión escrita:
Podéis descargar de este blog un par de cuadernillos de repaso para lengua castellana y matemáticas. Se trata de unas cuantas páginas en formato PDF con actividades seleccionadas tanto de lengua como de matemáticas, para entregar el primer día de clase (en especial, aquellos alumnos y alumnas a los que así se les ha recomendado este refuerzo en vacaciones).
Os sugiero que las recomendaciones anteriores las realicéis sin agobios, con flexibilidad, fijando un periodo del día, pero entendiendo que en circunstancias de viajes o de mucha actividad, puede suspenderse el trabajo.
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